PACHUCA DE SOTO, 01 MAR/NEWS HIDALGO/.- “La salud mental va asociada a una serie de actitudes físicas y cognitivas que producen una sensación de bienestar. Durante la adolescencia los jóvenes enfrentan presiones académicas, cambios hormonales, la búsqueda de identidad y conflictos familiares, sumado a la presión de pertenecer a grupos sociales, por lo cual, la adolescencia puede ser una etapa crítica para una intervención temprana y brindar apoyo emocional”, mencionó David Jiménez Rodríguez, profesor investigador del Área Académica de Psicología en la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
La etapa de la adolescencia y la juventud conlleva significativos cambios físicos, emocionales y sociales que pueden generar algunas dificultades mentales, como la depresión o el estrés, situaciones que derivarían en consecuencias graves a largo plazo, como el deterioro académico y dificultad en las relaciones interpersonales, por ello, es importante implementar estrategias efectivas para promover la salud mental y ofrecer apoyo adecuado a las y los adolescentes, así como a jóvenes en tan crucial etapa.
El experto Garza, David Jiménez Rodríguez, señaló en entrevista que los factores de riesgo en torno a la salud mental están asociados a la autopercepción, pues si una persona no se siente en igualdad de condiciones y capacidades respecto a las demás, comienzan a evidenciarse otros problemas, como por ejemplo, la depresión, la ansiedad o la baja autoestima, entre otros.
“Actualmente, la inmediatez con la que se obtienen las cosas provoca poca resistencia a la frustración y, por ende, la capacidad de reponerse ante una situación adversa. La falta de un automóvil, el rechazo, los fracasos amorosos o escolares se magnifican, para ellos el problema es más grande y verlo de ese modo tiene un impacto negativo en su salud, cualquier tipo de violencia que suceda en su entorno, como el consumo de alcohol, tabaco o cualquier tipo de droga, son factores de riesgo que no pueden pasar inadvertidos”, puntualizó.
Asimismo, Jiménez Rodríguez resaltó la importancia del ambiente familiar como un factor de prevención y cuidado hacia la salud mental, en donde hablar sobre la autoestima, la autonomía de las y los adolescentes, el respeto a las reglas, los valores, así como la regulación de las emociones es muy importante.
“Que los padres de familia tengan la disposición de hablar con sus hijos es uno de los factores protectores más grandes, puede contribuir a una buena autoestima y fortalecer la autonomía y la confianza de sus hijos e hijas”, añadió.
Finalmente, remarcó que la UAEH y el Instituto de Ciencias de la Salud (ICSa) realizan una ardua labor para ofrecer oportunidades y herramientas en favor del aprendizaje con temas asociados a la salud mental a través de la Clínica de Psicología.
“Como especialistas del área de la Psicología hay mucho que podemos hacer, todas las corrientes psicológicas tienen como propósito que las personas sean funcionales, alcancen sus metas y se sientan exitosas con su propia vida.
El impacto de la psicología es palpable en lo individual y en lo colectivo, por lo que debemos promover la auto
comprensión, el crecimiento personal y la adaptación a la adversidad”, concluyó.
